Pasando revista
Paso revista a mi vida y no fue amor lo que faltó porque mi
familia y amigos siempre fueron generosos. Disfruté, como cualquiera de mi
ración de vicio y bajas pasiones.
Tengo la conciencia tranquila porque no fui infiel, ni desleal,
ni egoísta en demasía.
No arriesgué mi vida por causas nobles, no fui mochilera por
Europa, ni misionera en el tercer mundo. Navegué por ríos tranquilos y hoy es
tarde para la aventura porque da tanta pereza hacer locuras.
Vaya par de gemelas
La reina de la revista, la gran Lina Morgan, aun recordará
aquella función en la que desde primera fila centrada un chaval roncaba
plácidamente mientras toda la compañía se desgañitaba con “agradecida y
emocionada solamente puedo decir… gracias por veniiiiiir” y es que ella seguro
que sabe lo que es trabajar duro durante toda la semana para pasar el finde con
la novia y darlo todo con la pasión de los ventipocos.
Calentito, cómodo y relajado … que más se puede pedir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario