jueves, 4 de abril de 2013

ENCRUCIJADA





ENCRUCIJADA

Al final siempre tendrás que aceptar que no todo en la vida va a salir bien. Todas las decisiones tienen daños colaterales. Aprender a fracasar es tan importante como aprender a triunfar y asumir que no le vas a agradar a todos es una gran lección de vida.
La máxima aspiración es a dejar el menor número de cadáveres en la cuneta de nuestro camino vital y conservar a los vivos más bellos y alegres junto a nosotros.

3 comentarios:

  1. Ve la encrucijada venir y piensa:"ahora me voy a parar". Aparca el coche en la cuneta. Siente que es un momento importante de su vida y decide, por primera vez, relajarse y pensar con calma.
    Muchos Kms. atrás deja toda una vida que iba, poco a poco, carcomiéndo su persona, como una gangrena que iba acabando con ella.
    En la encrucijada hay 2 caminos opuestos, es consciente que cada uno la llevará a un destino distinto.
    Reza a su Dios y sus seres queridos,y tira una moneda al aire. Arrancando el coche toma el camino de la izquierda, llena de esperanzas y dispuesta a sobrevivir

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  2. ENCRUCIJADA (I)

    …Y conseguimos el soñado trekking en el Himalaya, tras dos años ahorrando. Disfrutamos a tope estas montañas imposibles, que reflejan el cielo. Una tremenda tormenta nos sorprendió un atardecer en una encrucijada de caminos. Nuestra ruta seguía recta, pero Dharma, el sherpa, no sabemos por qué, propuso la derecha. No le preguntamos: le seguimos. Tras una hora de agua y sudor, en un recodo del camino empinado, cesó la lluvia y ante nosotros se abrió un valle encantado. Verdes, brillos, flores alpinas, cedros de luz.

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  3. ENCRUCIJADA (II)

    Y al fondo, camuflada en el paisaje la aldea de Dharma, donde su familia nos envolvió en un abrazo abierto. Olvidamos el itinerario oficial. Nos quedamos. Disfrutamos la lluvia, nos reímos con bromas universales, les acompañamos en sus oraciones y con su ganado, gozamos las montañas y la vida cotidiana de este pueblo resistente, envueltos en un tiempo regido por la lluvia y por el sol, por el té hirviendo y el fuego en las noches. Nos quedamos en esta encrucijada que cambió nuestras vidas.

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